El desenlace de la Copa Mundial de Fútbol Playa atrajo las miradas sobre un jugador en especial y no específicamente por su gran habilidad con el balón. Se trata del joven santo de los últimos días Naea Bennett, el capitán de la selección de Tahití, quien se negó a jugar la final frente a Portugal debido que esta se desarrollaría durante el día de reposo.

La noticia trajo una ola de comentarios de parte de los fanáticos del fútbol playa, y llamó la atención de la prensa especializada que lamentó la ausencia del seleccionado isleño en lo que sería el duelo más importante de su carrera deportiva.

Bennet es reconocido en Tahití por su nivel de fútbol excepcional. Marcó dos goles contra Irán en los cuartos de final y los dos goles igualmente en las semifinales contra Italia, un buen ejemplo de su nivel de juego se ve en este gol de lujo que convirtió en su más reciente partido.

El talento deportivo y la obediencia al día de reposo no es algo nuevo, sino que es un legado familiar. Su padre, Erroll Bennett, quien fue un seleccionado de alto nivel de la misma especialidad, marcó un precedente en el fútbol de su país, era el mejor, quizás el mejor del Pacífico Sur.

Cuando los misioneros le enseñaron el evangelio y le preparaban para el bautismo se le enseñó a Erroll sobre guardar el día de reposo, pero todos sus partidos eran en Domingo. Él pensaba que si su esposa y él se bautizaban, tendría que dejar el fútbol… La decisión de Bennet no pasó desapercibida. Después de todo el fútbol es el deporte más popular en Tahití, y él era la estrella de su equipo».

«Él tenía la presión de su familia, sus compañeros de equipo y de aquellos quienes organizaban los partidos. Pero cuando Erroll les dio la noticia de que el no jugaría nunca más los domingos, los directivos deportivos comenzaron a hacer cambios en los calendarios para que Erroll pudiera jugar. Y los programaron para las noches en los días de semana”, y así han permanecido hasta hoy.

Por esta razón, Erroll ha sido considerado como un ejemplo de obediencia y fe en varias publicaciones de la Iglesia, incluyendo la revista Liahona y manuales de clases.

Esta era la primera vez que Tahití estaba en una final de fútbol playa y les correspondía jugar en Portugal con los locales. Interesantemente en 2013 Tahití fue anfitrión del mundial y perdieron en semifinales, de haber ganado Naea Bennett hubiese podido jugar su primera final la cual se desarrolló, nada más ni nada menos, que un sábado.

Al respecto de la decisión de Naea de no jugar la final del mundial de este año, Teva Zaveroni, un compañero de la disciplina público en su cuenta de Facebook dirigido a aquellos compatriotas que aún no entienden la decisión de Bennett.

“Este mensaje va dirigido a nuestro pueblo, por favor, dejen de criticar la no participación de Naea en el partido del domingo. Desde el comienzo que siempre ha sido así, lo sabíamos. No fue él quien se declaró capitán sino que su equipo lo eligió… respeten su decisión así como lo hacemos nosotros… la clave del éxito deportivo reside tanto dentro como como fuera de la cancha. Su comportamiento [hablando del pueblo] daña la vida de un grupo que ha salido adelante gracias a la creencia religiosa de Naea, instaurada en el equipo y que ha convertido a los TIKITOA en un equipo de excelencia que juega limpio”.

Para los Bennetts no es una decisión nueva, es tanto que en su país como en la comunidad de miembros de la Iglesia han sido reconocidos por su fiel observancia del día de reposo, y su ejemplos han quedado plasmados en manuales de clases de la Iglesia al tratar la observancia del día de reposo y en otras publicaciones de la Iglesia como las revistas Liahona y New Era.