Muchos miembros de la Iglesia llegan a un punto en su vida, cuando sienten que sus experiencias y las promesas en su bendición patriarcal no llegan a sus vidas o simplemente se pierde la fe en creer que dichas promesas se cumplirán. Recientemente en Facebook el Élder D. Todd Christofferson compartido ideas que pueden ayudarnos a encontrar la esperanza y la comprensión en estas situaciones.

La semana pasada tuve el privilegio de hablar a un maravilloso grupo de adultos solteros. Estas son algunas de las ideas que expresé:

Algunos de ustedes puede que se hayan preguntado sobre el valor y significado de su vida y lo que el Señor piensa de ustedes. Hay cosas que pueden haber pasado o no en su vida. Puede que les preocupen partes de su bendición patriarcal que todavía no se han cumplido o que parece que no se cumplirán. Por favor sepan que todavía hay muchas cosas que sucederán en su vida antes de su resurrección. ¡Puede suceder mucho más de lo que esperan! La vida mortal no es el comienzo o el final; la clave para todos nosotros es lograr todo lo que podamos ahora.

Recuerden que “la palabra” que Alma nos enseñó debe ser plantada en nuestro corazón. Él definió “la palabra” como una verdad fundamental: “… creer en el Hijo de Dios, que [ha venido] para redimir a los de su pueblo, y que padecerá y morirá para expiar los pecados de ellos; y que se levantará de entre los muertos”. Todo proviene de esa verdad. Preparen el terreno bueno y profundo para que esa semilla crezca en ustedes. No permitan que las espinas y las preocupaciones del mundo la ahoguen, sino que sea muy fructífera.

Cultiven y pongan en práctica sus talentos; desarrollen los dones espirituales que les ha dado Dios; no se contenten en donde se encuentran ahora; prueben cosas nuevas; perseveren. Recuerden que en la parábola de los Talentos la recompensa es la misma para la persona que aumentó sus cinco talentos a diez y la que incrementó sus dos talentos a cuatro: “… Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor”. Es bueno admirar una cualidad virtuosa en alguien y buscar incorporarla en la vida de ustedes, pero no se comparen con otras personas. El Señor sencillamente espera que ustedes sean diligentes con lo que tienen, incluso ustedes con un poco pueden hacer mucho. Cualquier cosa, si son diligentes, es suficiente.

Vivan con gratitud por todo lo que tienen, las respuestas a sus oraciones, los talentos que se les ha dado y las maneras en que el Señor manifiesta Su influencia en la vida de ustedes. Tengan en cuenta y reconozcan Su mano y expresen gratitud. Él desea darles más. En ocasiones cuando no me siento inspirado en mis oraciones, inicio con gratitud, agradeciendo a Dios las bendiciones específicas en mi vida; entonces viene el Espíritu y me acerca más a Dios.

Oren; dediquen tiempo al Señor; recuerden que ustedes no son extraños para el Padre Celestial. Él no los podría amar mejor; Su amor es perfecto y completo. No se preocupen sobre el tiempo y las oportunidades perdidas. Vivan de manera productiva, fiel y con gratitud. Regocíjense en todo lo que está por venir y en todo lo que ya tienen. Dios puede sanarlos y les concederá, a Su tiempo, todo lo que Él ha preparado para ustedes y todo lo que ha prometido a los fieles.