SALT LAKE CITY, Utah — Se ha animado a los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días a proveer de ayuda a los refugiados en todo el mundo. La Primera Presidencia envió una carta el pasado 27 de octubre de 2015 a los líderes de la Iglesia firmada por el presidente Thomas S. Monson y sus consejeros, los presidentes Henry B. Eyring y Dieter F. Uchdorf.

Está programado que esta carta sea leída durante las reuniones sacramentales en todo el mundo.

La carta declara que “es con una gran preocupación y compasión que observamos el drama de millones de personas alrededor del mundo que han dejado sus hogares, por conflictos civiles y otras dificultades, en busca de socorro”.

La carta explica que la Iglesia está ayudando a los migrantes y refugiados en varios países “gracias a la generosa ayuda de nuestros miembros”.

Los santos de los últimos días han proveído de ayuda a refugiados en el Medio Oriente por más de una década, entregando cientos de miles de frazadas, ropa, suministros médicos de emergencia, alimento y otro recursos para los refugiados en Jordania, Líbano, Turquía y Siria.

En respuesta a la reciente crisis en Europa, en septiembre pasado la Iglesia comprometió, adicionalmente, US$5.000.000 para ayudar a las familias desplazadas.

La carta continúa diciendo que “los miembros puede contribuir al Fondo Humanitario de la Iglesia usando las papeletas de ‘Diezmo y otras ofrendas’. Tambien invitamos a las unidades de la Iglesia, a las familias e individuos a participar en proyectos locales de socorro, en donde sea práctico”.

La carta concluye así: “Que el Señor le bendiga al dar servicio cristiano a aquellos que los necesitan”.