Por Victor Henriquez y Daniel Ojeda

La siguiente cita ha sido en ocasiones atribuida al presidente Boyd K. Packer y a otros líderes de entre las Autoridades Generales de la Iglesia:

Ustedes fueron una vez generales en la Guerra Celestial, y un día, cuando ustedes estén nuevamente en el mundo de los espíritus, estarán asombrados al saber con quienes están asociados. Ustedes preguntaran a alguien en que época vivió y podrán oír: “Yo estuve con Moisés cuando abrió las aguas del mar rojo”, “Yo ayudé a construir las pirámides”, o “Yo luché junto al capitán Moroni”. Mientras ustedes estén ahí asombrados, alguien les preguntará: ¿En el tiempo de que profeta vivieron ustedes? y cuando digan “en el de Gordon B. Hinckley” un silencio se apoderara de cada vestíbulo y pasillo del cielo, y todos los asistentes se inclinaran ante su presencia.

Ustedes fueron retenidos seis mil años porque eran los más talentosos, los más obedientes, los más valientes y los más rectos, ¿Aun lo son?

¿Es auténtica esta cita?

No lo es, se le ha atribuido al presidente Packer, pero no hay registro de que lo haya dicho y es más, la misma Iglesia ha confirmando específicamente que es falsa. El presidente Packer, en ese entonces Presidente en Funciones del Quórum de los Doce, realizó la siguiente declaración respecto de la declaración que se le atribuye:

Continuamos recibiendo reportes de la distribución de una cita atribuida a mi, que comienza con “Los jóvenes de la Iglesia de hoy en día fueron generales en la guerra en los cielos” y que termina con la declaración de que cuando ellos retornen al cielo, todos los que estén presentes se inclinarán ante ustedes.

Yo no realicé tal declaración, y no creo en ella.

La declaración, en ocasiones, ha sido atribuida a otros de la Primera Presidencia y de los Doce. Ninguno de los hermanos hizo tal declaración.

El presidente Packer también envió una carta a los presidentes de misión requiriendo su ayuda para clarificar este asunto entre misioneros y miembros, y ha sido incluida en algunos sitios de Internet que tienen la declaración una nota diciendo que él no hizo tal declaración.

El sistema educativo de la Iglesia (SEI) publicó en marzo del 2014 una serie de citas falsas que circulan en internet con el fin de desmentirlas y evitar su propagación en las clases del SEI.

Mensaje en que la Iglesia niega la autenticidad de la supuesta cita del presidente Packer.
Mensaje en que la Iglesia niega la autenticidad de la supuesta cita del presidente Packer.

¿Qué significa que una cita no sea auténtica?

Significa, al menos, que dichas palabras nunca fueron pronunciadas por la persona a quien se le atribuyen.

¿Significa que los jóvenes de esta dispensación no tuvieron un papel importante en la vida preterrenal?

No necesariamente, aún cuando las revelaciones modernas nos enseñan que aún en la vida preterrenal había espíritus nobles y grandes, no sabemos mucho acerca de las posiciones de los espíritus en la guerra de los cielos, es posible que algunos que viven en estos tiempos hayan tenido un papel importante, quizás sumamente importante, pero no tenemos el conocimiento suficiente para establecer que tal generación tuvo un determinado rol.

Además, si bien las personas en los últimos días o muchas de ellas podrían haber tenido un papel importante, esto no nos permite asegurar que otros se inclinarán ante ellos, de hecho en cierta ocasión los hermanos de Nefi se postran ante él y se disponen a adorarlo pero él no se los permite (1 Nefi 17:35).

Respecto a la vida premortal, es posible consultar las escrituras y los manuales para tener un mejor entendimiento de lo revelado hasta el momento (ver, por ejemplo Doctrina y Convenios 138).

¿Es importante verificar su autenticidad o basta con que nos inspire?

Sí, es importante verificar su autenticidad, y no, no basta con que enseñe algo bueno o que nos motive a hacerlo.
Obviamente es importante encontrar inspiración para vivir el evangelio, pero no podemos esperar que el espíritu nos bendiga mientras ponemos nuestra fe en un principio o declaración que no es auténtica.

Creemos en la importancia de mantener pura la doctrina, y para esto es de vital importancia mantener y enseñar las palabras de los profetas tal y como ellos las dijeron. Los miembros de la Iglesia consideran las palabras inspiradas de los profetas como la palabra misma del Señor y por eso no podemos llegar y atribuirles cualquier cosa, por inspiradora o buena que nos pueda parecer.

En el Manual General de Instrucciones 2, sección 21.1.39, vemos:

Declaraciones que se atribuyen a los líderes de la Iglesia: De vez en cuando, se distribuyen declaraciones que erróneamente se atribuyen a líderes de la Iglesia. Muchas de esas declaraciones tergiversan las enseñanzas actuales de la Iglesia y se basan en rumores e insinuaciones. Nunca se transmiten oficialmente, sino que van de boca en boca, por correo electrónico u otros medios informales. Los miembros de la Iglesia no deben enseñar ni transmitir ese tipo de declaraciones sin verificar que provengan de fuentes aprobadas de la Iglesia, como declaraciones, comunicaciones y publicaciones oficiales.

Cualquier apunte que se tome cuando las Autoridades Generales, los Setentas de Área u otros oficiales generales de la Iglesia tomen la palabra durante las conferencias de estaca u otras reuniones no se debe distribuir sin el consentimiento del orador. Los apuntes personales son para el uso exclusivo de la persona.