Con los dos misioneros que fueron detenido en Samara, Rusia la semana pasada, ya son 6 los voluntarios de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (anteriormente conocidos como misioneros en el Área Europa Este) que han sido detenidos y están siendo deportados por el gobierno de Rusia luego de que se promulgada una nueva ley antiterrorismo que limita las actividades religiosas, según informaron medios locales de Utah.

Según escribió el Salt Lake Tribune, el vocero de la Iglesia, Eric Hawkins informó que las detenciones se debieron a «tecnicidades relacionadas con sus visas», por lo que deberán abandonar el país.

KUTV complementó indicando que 5 de los 6 afectados terminarán sus servicios en otras misiones rusoparlantes (al menos dos de ellos en Ucrania) y el sexto fue relevado tempranamente.

Cuando se dio a conocer la promulgación del nuevo marco que regula a las instituciones religiosas y que restringe el proselitismo, la Iglesia respondió afirmando que “honrará, sostendrá y obedecerá la ley. Los misioneros permanecerán en Rusia y trabajarán dentro de los requerimientos de estos cambios. La Iglesia estudiará y analizará más allá la ley y su impacto a medida que esta se ponga en efecto”.

Imagen destacada: Misioneros predicando el evangelio en Rusia. | Captura de pantalla de YouTube.